Las propiedades del jengibre

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El jengibre es un alimento genial con un sinfin de propiedades, y no un simple condimento. Aún con el páladar recordando las ricas galletas navideñas o cualquier tarta de zanahoria, es hora más que merecida de recomendaros está raíz carnosa que no sólo especia con un toque potente las comidas sino que por si sola es muy buena para la salud: ayuda a combatir la congestión del resfriado, es depurativa, enérgetica y ayuda a adelgazar: ¿quieres descubrir las bondades del jengibre?

El jengibre es la raíz de una planta muy rica en vitaminas y minerales:contiene vitamina C, fosforo, maganeso, sodio, silicio y zinc, pero sobre todo destaca por su fibra y sus aminoácidos, ácidos grasos esenciales y antioxidantes.

 

  • Es un antivomitivo natural que ayuda a tratar nauseas, empachos, mareos, los efectos de la quimioterapia
  • Tiene propiedades antibióticas que ayudan a combatir ulceras gástricas, gastritis, gases, diarreas y otras infecciones intestinales.
  • Fluidifica la sangre y favorece la circulación con lo que evita trombos, cuida del corazón y colabora en la eliminación del colesterol por esto y por sus aceites omega 3
  • Es antiinflamatorio con lo que mejora los dolores articulares y musculares( ya que además facilita la circulación), los de la artrosis y el reuma, los dolores menstruales, las narices congestionada y la fiebre de la gripe. además suaviza la garganta.
  • También tiene cualidades antivirales lo que refuerza la idea de que lucha contra el resfriado y la gripe (ayuda a eliminar el moco y favorece la expectoración) y otros dolores.
  • Sus flavonoides entre otras sustancias hacen que sea estimulante y antidepresivo, lo que junto a sus hidratos de carbono lo convierten en un chute de energía que es capaz de sustituir al café. También hay quien lo considera afrodisíaco.
  • Neutraliza la protasgladina, razón por la que es uno de los aliados contra la migraña.
  • Masticar jengibre  elimina el mal aliento y atenúa el dolor de muelas

 

La forma más común de consumirlo es en infusiones de jengibre crudo, con una cucharada de miel en caliente o con ésta y limón, en frío.También se puede añadir en la cocina bien fresco y laminado o en polvo seco, aunque esta versión es menos poderosa. Puede comerse crudo o cocinado, pero hay que tener cuidado porque su sabor es picante aunque con cierto dulzor. Infusionado se puede aplicar para aliviar malestar empapando compresas o algodones y aplicando en zonas inflamadas o dentro de la boca, así o mediante enjuagues.

 

Imagen| Praisaeng

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